Yogur casero fácil
Ingredientes
8
tazas de leche
½
taza de yogur natural
½
taza de yogur de frutas
Preparación
Hierva
la leche a fuego medio en una olla bien limpia. Si está sucia o con grasa no
produce el resultado deseado. Retire la leche del fuego y deje refrescar pero
no completamente fría. La temperatura de la leche es muy importante en este
punto ya que debe estar en el punto medio porque si está muy fría, el cultivo
no crecerá y, si está muy caliente el calor matara la bacteria en el cultivo. Si
tiene un termómetro, la temperatura ideal es entre 106° y 109°F; si no,
introduzca el dedo meñique en la leche y cuente hasta 20, si puede tolerar el
calor, la temperatura es la correcta.
Vierta
la leche en fuentecitas de pyrex y reserve una taza. Ponga una bandeja en el
centro de la parrilla del horno y ponga allí las fuentecitas. Diluya el yogur
natural en la taza de leche fría y la mitad del yogur de frutas, si lo va a
hacer dulce. Gradualmente vaya agregando la mezcla en distintas orillas de las
fuentecitas. Cubra con tapas y, suavemente empuje la parrilla dentro del horno.
No encienda el horno. Solo deje reposar sin abrirlo durante toda una noche.
El
yogur debe estar bien protegido de las corrientes de aire sin mover ni tocar
durante este tiempo. Por eso el horno es el sitio perfecto para este proceso. Este
yogur se puede guardar en la nevera por 4 días máximo. Para un yogur bajo en calorías,
utilice la leche baja en calorías y descarte el yogur de frutas.
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